16 abril 2007

Dos carros de madera

Ayer estuve en Cacacaos, cuna de la artesanía piurana y peruana, como lo mostré anteriormente, pude apreciar la diversa variedad de objetos artísticos creados por el ingenio de su gente, como no destacar este ingenio, quizás haya sido inculcado por sus antepasados, los Tallanes y los Vicús, tema de otro texto, se resalta la originalidad de todas sus creaciones.

Habían un sin número de cosas que saltaban a la vista, quise comprar algo - quise comprar todo, me sentí atraído por la belleza que contiene cada pieza de artesanía; entre todos pude localizar unos carros pequeños de madera impactantes, con diseños clásicos antiguos, prometo ir en unos días, no muy lejanos, a comprarme dos, uno para mi oficina y otro para mi colección, ya los verán, son únicos.

Además, puede experimentar el espíritu de poblador de Catacaos, muy religioso por cierto, todos se concentran los domingos para vivir religiosamenete desde sus costumbres, ese día hubo procesión; el Sr. de la Misericordia, la mayoría de la población creo, acudió a la procesión. La Semana Santa de Catacaos, es una fiesta tradicional en donde se vive verdaderamente la religiosidad.

Ese día luego de almorzar un delicioso "Sudado de pescado", entré a la Iglesia, muy bella, parece una Capilla Sixtina, es una obra que combina el arte clásico con el moderno y resalta a belleza de la ciudad.
Interior de la Iglesia de Catacaos

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